Dìa de las Madres 2022

Hoy en conmemoración del Día de las Madres, buscamos visibilizar que es un hecho lamentable que muchos hombres que son padres se desentienden de la manutención, salud, educación y bienestar de sus hijos, la problemática que causa esta acción, es que actualmente muchas de las mujeres que son madres cuidan solas a sus hijos, son la generación del individualismo maternal, y están viviendo día a día lo difícil que esto es, al tener que combinar y armonizar los diferentes roles sociales de su vida, como son el familiar, el comunitario y el laboral, pero saben que por sus hijos dan cada día lo mejor de si, no van a claudicar y seguirán adelante sin importar lo difícil, lo cansado, o lo estresante que esto sea; y a pesar que todas las mujeres y en especial las que son madres tienen derechos laborales, la mayor causa de pérdida de derechos es que ser madre absorbe la mayor parte el día y esta loable vocación no conoce de horarios, las mujeres que están viviendo la maravillosa etapa de ser madres son muy afortunadas, pero esta condición también las pone en vulnerabilidad, ya que el trabajo de los cuidados recae casi siempre sobre ellas, hay madres que cuidan solas o en pareja, pero hay sobre representación de hombres que son padres y dejan de cuidar a sus hijos, hay padres que abandonan los cuidados porque se ponen a trabajar doble turno, o porque enferman, o simplemente porque la situación les desborda y se desentienden de su responsabilidad, y seguimos escuchando el retrograda discurso de que “La niña o el niño están mucho mejor con su madre”, como si hubiera jerarquías en las responsabilidades, y como mujeres madres de familia nos ha tocado luchar contra estos estereotipos toda la vida. No es justo que los servicios a los que tienen derecho las trabajadoras que son madres, como el derecho a guarderías, o el servicio medico, estén condicionados o el acceso dependan de donde vivas, el agravio comparativo en calidad de vida para los hijos de las trabajadoras entre una Oficina Central y una Oficina de Representación es brutal, no todos los municipios del país tienen servicios de guardería o de atención medica, y esto cae en agravio de las trabajadoras, ya que son ellas en quienes recae la responsabilidad de concertar las citas medicas con médicos y especialistas, y trasladarlos para que sus hijos reciban los cuidados médicos que requieran.La reducción, recorte y negación de los derechos laborales por parte de los directores de área o jefes directos, en base a su propia interpretación de los lineamientos o códigos de conducta institucional, cotidianamente y de manera sistemática van en prejuicio de los derechos laborales de las trabajadoras y los trabajadores de base, afectando directa y mayoritariamente a la mujer trabajadora que es madre, pues menoscaba o reduce significativamente el acceso a los derechos laborales y sindicales, ganados, plasmados y garantizados en Nuestras Condiciones Generales de Trabajo. Lo anterior no es exclusivo de las Oficinas Centrales de la Dependencia, por el contrario, es un problema que se replica en todo el sector agrario, y se expresa en condiciones de precariedad y desventaja laboral que afectan a las mujeres trabajadoras que son madres en las diferentes Oficinas de Representación, en todos los Estados del país. A la lucha que ha enfrentado históricamente la mujer que es madre contra el patriarcado en el ámbito privado y social, también hay que sumar la vida laboral, esta se ha convertido en otro frente de lucha para la mujeres pues han encontrado formas de opresión quizá más severas dado el carácter del opresor por su cargo de superior jerárquico, sin importar si el genero de esta figura de autoridad es masculino o femenino, quienes en una clara doble moral la cual impregna a todo el Sector Agrario, al mismo tiempo que lo desestabiliza. La base de la unión en nuestra organización sindical, ha sido desde el comienzo y sigue siendo la asociación contra la injusticia de las condiciones laborales, la lucha por la dignificación de la vida laboral de las trabajadoras, los trabajadores, y sus familias. En la lucha de nuestro Sindicato por un habiente laboral más justo, las mujeres han sido la piedra angular de nuestro movimiento, participado activamente en la constante transformación de las condiciones laborales de todos nuestros representados, frecuentemente se les ha conminado a poner sus propias reivindicaciones en primer plano, porque reconocemos y somos consientes de la urgencia de mejorar el ámbito laboral para ellas. La constante lucha de de las mujeres y hombres comprometidos integrantes de nuestra organización sindical, contra las injusticias laborales, han permitido el logro de importantes avances, aunque aún no podemos hablar de que se haya obtenido la plena garantía de los derechos de las mujeres que son madres, por lo que la lucha por el reconocimiento y respeto de sus derechos humanos y laborales continúa vigente, y debería ser consigna de primer orden en las negociaciones de Condiciones Generales de Trabajo entre todos y no solo uno de los sindicatos representantes de trabajadores y las autoridades del Sector Agrario, privilegiando siempre no tolerar trato injusto hacia las mujeres que son madres o están embarazadas, con la finalidad de lograr implementar medidas concretas para la implementación de esas ideas a la vida laboral.Sin embargo, desde la misma SEDATU como cabeza de sector, no se avanza en estas transformaciones y contrariamente, se profundiza la problemática de las mujeres madres trabajadoras sindicalizadas, ya que la participación de ellas en el trabajo realizado en sus diferentes áreas de trabajo, está condicionada por la situación familiar que cada una de ellas presenten, haciendo una discrepancia en los lineamientos de evaluación a la hora de asignar los puestos, las funciones, los estímulos y recompensas de la trabajadora, en base a criterios de decisión como son; si la trabajadora tiene hijos, si sus hijos están en etapa de lactancia, las responsabilidades familiares de ella, y por otras derivadas del criterio individual de los directores de área o jefes inmediatos, quienes pretenden imponer y normalizar su propia idea del funcionamiento interno de la organización institucional, ignorando completamente los derechos de las mujeres trabajadoras que son madres, contenidos en nuestras Condiciones Generales de Trabajo.Históricamente la participación directa de las mujeres en nuestra Organización Sindical a todos los niveles, desde el nivel de Secretaría Seccional hasta la Secretaría General de la misma, ha sido y sigue siendo de acceso garantizado para cualquier persona, sin importar si es mujer u hombre, o si es mujer madre de familia, nuestro sindicato se distingue por tener dentro de sus Estatutos, artículos que establecen y garantizan los derechos sindicales y laborales de la mujer, la mayoría de todas estas disposiciones buscan tener siempre equidad de genero tanto en la dirigencia del Comité Ejecutivo Nacional, como en las diferentes Secretarías Seccionales, además de contar con Secretarías de Vigilancia, las cuales cuentan con mecanismos de verificación y de supervisión que hagan efectiva toda nuestra legislación vigente. Sin las mujeres no se puede hablar de Sindicalismo en el Sector Agrario, porque ellas han ayudado a construir la historia del SINDET-SEDATU, nuestra Organización Sindical es un resguardo para todas las mujeres y en especial para las que son madres frente a las injusticias laborales, pues es bandera de las libertades, la lucha y defensa de los derechos de sus trabajadoras, quienes a través del tiempo, han sido invisibilisadas, silenciadas y excluidas por otros Sindicatos, desconociendo el aporte en las luchas sindicales y sociales de las trabajadoras.¡Feliz Día de las Madres!Atte. Erika Marcela Vidal CarreraSecretaria GeneralSINDET-SEDATU

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *